Ruta en furgo por la Costa Brava

La Costa Brava es única por su paisaje tan pintoresco: montañas cubiertas de pinos y avetos que cubren los acantilados que caen abruptos hacia unas magníficas calas de agua cristalina. También tiene playas largas, de arena fina o arenosa. En sus 214km de litoral seguro que te enamorarás de alguna de sus playas porque es una costa con mucha variedad. ¡Hay para todos los gustos! Y qué decir de sus pueblos… villas de pescadores, pueblos turísticos y otros de medievales, una gastronomía mediterránea increíble y muchas rutas para hacer en bici o andando. Es un auténtico regalo poder ir en ruta con nuestra furgoneta camper por todos los rincones de la Costa Brava.

Para nosotros es especial. Es «nuestra costa», la más bonita y cercana a nuestro lugar de residencia, y por eso taaaanto tiempo pasamos ahí y tantas cosas tenemos que contaros para que podáis estar cómodos con la furgo y podáis descubrir los pueblos y playas con más encanto.

Es un destino de vacaciones para mucha gente, tanto de Catalunya como de Francia. En verano hay zonas que están muy masificadas, pero siempre se puede encontrar un lugar para estar tranquilos gracias a su gran variedad de paisajes y playas. Lo mejor de lo mejor es disfrutarla fuera de temporada alta. Lo bueno de la temporada alta es que todos los municipios ofrecen conciertos, mercadillos o fiestas populares que os encantarán.

El Camí de Ronda es muy popular, os lo recomendamos 100% para hacer andando e ir descubriendo todas las calas y playas. Se trata de un camino costero que resigue el abrupto litoral de la Costa Brava desde Blanes hasta Portbou. Pasaréis por acantilados, túneles, escaleras infinitas y rincones muy especiales. En verano, cuando las temperaturas son altas, el sonido de las chicharras os abrumará. Su historia cuenta que fue creado para conectar las poblaciones y playas, y era el camino que usaba la guardia civil para realizar «la ronda» y controlar las actividades ilegales de la costa.
En la web del Camí de Ronda podéis encontrar los diferentes tramos del recorrido. Nosotros os contaremos más a bajo el tramo que más nos gusta.

Si sois más de ruta en bici también pasa por la Costa Brava «El Carrilet», un carril bici que sigue la ruta del tren de vía estrecha Girona-Sant Feliu y nos permitirá conocer 2 comarcas en sus 39,7km de recorrido en llano. Podéis encontrar más información de todas sus rutas aquí.

De Blanes a Tossa de Mar

La Costa Brava abre sus puertas en Blanes, un pueblo conocido por su cultura y sus toques del gótico catalán. Pero también por sus aguas, playas y calas. Y por ser el punto de partida del Camí de Ronda de toda la costa. Destacamos las calas Boadella y Treumal.

Cada año, a finales de julio, se celebra uno de los eventos más conocidos de la Costa Brava: el Concurso Internacional de Fuegos Artificiales.

Entre Blanes y Tossa de Mar se encuentra Lloret de Mar, conocido por ser un núcleo donde en verano se concentran muchos turistas extranjeros. Bajo nuestro punto de vista no tienen demasiado encanto comparado con el resto de lugares mágicos que encontramos en la Costa Brava.

A nosotros nos gusta más Tossa de Mar. Por su encanto y su núcleo medieval fortificado que crece encima del mar. Se dice que es uno de lo pueblos más fotografiados de la Costa Brava, y también de los más aislados debido a su escarpada ubicación que nos dejarán pequeñas calas escondidas entre los acantilados y la vegetación. Ahí van algunas recomendaciones: Cala Salions y Cala Pola.

Sant Feliu de Guíxols y S’agaró

Sant Feliu de Guíxols es un señor pueblo que pese al turismo tiene identidad propia. Es una antigua villa de pescadores que se ha convertido en un activo para disfrutar de ocio, cultura y deporte. Podéis disfrutar de su centro histórico, su puerto y el mercado de los domingos que se celebra en la Plaza del Mercado.

¿Os atrevéis con la Vía Ferrata entre sus escarpados acantilados frente al mar? Si podéis, os lo recomendamos mucho.

Y de Sant Feliu de Guíxols nos vamos a S’Agaró, un núcleo urbano que pertenece al municipio de Castell-Platja d’Aro, y es conocido por su estilo novecentista.
Su playa tiene un encanto especial y una arena fina maravillosa, y un enclave perfecto para recorrer parte del Camí de Ronda hasta Platja d’Aro.

Platja d’Aro y Sant Antoni de Calonge

Platja d’Aro es muy conocida por su eslogan de ocio 365 días al año. Es así, TODO está abierto durante cualquier día del año, así que ahí tenéis cualquier tipo de servicio que os pueda interesar.  En verano las tiendas pueden llegar a estar abiertas hasta las 12 de la noche. ¡Ah! También es conocido por su ambiente por la noche con alguna discoteca y varios bares nocturnos. ¡Diversión asegurada!
En verano, durante los meses de julio y agosto, se celebra La Santa Market, un recinto al aire libre con paraditas de ropa, complementos, gastronomía, conciertos y actividades.

Tiene unos 10.500 habitantes, pero en temporada alta se multiplican mogollón.
Básicamente se divide en 2: el paseo marítimo con bares y restaurantes y el paseo del centro con muchas tiendas y también restaurantes. En pleno verano la circulación para cruzar el pueblo es un poco caos, con lo que mejor lo hagáis andando.
Si bien su Platja Gran es la playa que baña todo el pueblo, también se pueden encontrar bonitas calas a las que podemos llegar andando por el Camí de Ronda desde cualquier extremo del paseo marítimo del pueblo.

Por el extremo que conecta Platja d’Aro con S’Agaró os recomendamos la Cala Sa Conca. En el otro extremo podéis encontrar la Cala del Pi, un lugar donde siempre nos gusta iniciar el Camí de Ronda y llegar hasta Sant Antoni de Calonge pasando por una decena de calas diferentes, cada una con su encanto. Os destacamos la Cala Roques Planas.

Sant Antoni de Calonge tiene también un cierto parecido a Platja d’Aro, aunque sus comercios respetan más los domingos. Su paseo marítimo (que te lleva hasta Palamós) tiene mucho encanto, y en época estival suelen haber mercadillos artesanales.

Tanto en Platja d’Aro como en Sant Antoni de Calonge hay diversidad a la hora de pernoctar: free camping, áreas y campings. Pero nosotros os recomendamos el área de Platja d’Aro por su comodidad.

Pernocta

El área de autocaravanas de Platja d’Aro está muy céntrica, con sombras y un parque al lado. Es genial para dejar la furgo aparcada unos días y moverte andando o en bici.

Palamós

Tenéis que visitar el núcleo urbano de Palamós y su puerto. De la industria pesquera surgen muchas actividades de interés como la subasta del pescado o la visita al Museo de la Pesca. ¿Habéis oído hablar de las gambas de Palamós? ¡Por algo será!
También podéis disfrutar de rutas de enoturismo.

Para hablar de Palamós en furgo probablemente tengamos que hablar de la Platja del Castell y las calas que le siguen en su litoral. Podéis quedaros con la furgo en el parking de la Platja del Castell y desde ahí empezar un tramo del Camí de Ronda que os lleven de Cala Estreta hasta la Cala del Crit, con sorpresas garantizadas (ahí lo dejamos). Tenéis que verlo.

También es conocida la Platja La Fosca y la Cala S’Alguer. En esta cala, y en temporada baja, puedes dormir con la furgo en un entorno idílico. En verano cierran el acceso, pero siempre puedes visitar la cala andando. ¡Merece mucho la pena!

Pernocta

Podéis dormir en el parking de la Platja del Castell. Hay un chiringuito en la playa. En verano cobran 5€ por aparcar todo el día.

Calella de Palafrugell y Llafranc

Calella de Palafrugell es de los pocos pueblos que no ha sufrido un gran cambio por el turismo, ya que aún se pueden encontrar los pavimentos empedrados, las calles estrechas o esas preciosas casas de pescadores frente al mar. Para nosotros esto es «la auténtica Costa Brava». No os dejéis de dar un baño en la Cala El Golfet, quizá una de las más bonitas de esta zona. En el mismo parking de la cala podéis dormir sin problema, eso sí, no hay mucho espacio de parking por lo que en temporada alta puede ser complicado encontrar un sitio.

En esta zona es «más difícil» encontrar un sitio para pernoctar libremente, sobretodo en verano, con lo que hay diversidad de campings que pueden serviros.

En verano se celebra el Festival de Cap Roig, en el Jardín Botánico, donde diferentes artistas reconocidos hacen sus conciertos. ¡También son muy populares las habaneras en la playa!

Ir hasta Llafranc andando puede ser una buena actividad, ya sea por sus calles o por el Camí de Ronda disfrutando de las calas escondidas de esta parte del litoral.

Llafranc también tiene mucho encanto, quizás también gracias a sus pequeñas dimensiones, esa tranquilidad que te da y sus aguas. Hay un mirador donde se puede ver la zona central de la Costa Brava, situado en el faro de Sant Sebastià. ¡Os lo recomendamos! Además, al lado, hay una zona de picnic rodeada de naturaleza en la que podéis descansar con vuestra furgo, incluso podéis dormir ahí sin problema.

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En el parking de la Cala El Golfet podéis dormir, aunque en temporada alta os costará encontrar sitio.

Tamariu

Tamariu es un pueblo pequeñito, pocos habitantes y con esa esencia de antigua villa de pescadores. ¡Nos encanta! Tenéis la Platja de Tamariu y justo al lado la Platja dels Lliris, donde encontraréis un trampolín entre las rocas (no hay peligro) para pegaros unos saltos.

Podéis reseguir su escarpada costa por el Camí de Ronda, en kayak o en barca para poder descubrir rincones como la Cala Pedrosa, la Cala d’Aigua Xelida (os la recomendamos mucho) o la Cala Marquesa.

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En el parking de la Cala d’Aigua Xelida podéis pernoctar sin problema. En temporada alta el parking se llena desde primera hora de la mañana. Sin servicios.

Begur

Begur se encuentra en medio de la Costa Brava, y su tramo por el Camí de Ronda a nosotros nos ha robado el corazón. El tramo de Platja Fonda hasta la Cala de Aiguablava es de los recorridos que más nos gustan.

La Cala de Aiguablava es de las más bonitas, pero pierde el encanto cuando está súper masificada en agosto. ¡Como todo! Desde ahí y en dirección a Platja Fonda por el Camí de Ronda encontraréis la Cala Smiroli y la Cala d’En Malaret, en plena naturaleza y atravesando esos túneles «contrabandistas» de los acantilados.

Después llegaréis a la Platja de Fornells, que se encuentra entre el club náutico y unas rocas con escaleras que os permitirán hacer snorkel con comodidad. Para ir con vuestros perros, y poder estar solos hasta en verano, os recomendamos la Cala n’Estasia.
Y si seguís andado un poco más por el camino llegaréis hasta la piscina natural Es Cau, muy fotografiada, aunque el baño en esa zona según la temporada está privatizado por unos apartamentos que hay justo al lado. Veréis a un vigilante, que no os dejará bañar aunque sí sacar alguna foto para el recuerdo. Y para acabar ese tramo podéis llegar hasta la Platja Fonda, muy salvaje y bonita.

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Parking de arena al lado de la Platja Fonda. Ideal para ruta por el Camí de Ronda. En verano hay un vigilante y te cobra 2€.

Pals

Pals y su núcleo urbano destacan por su villa medieval, calles empedradas, tumbas y la muralla. Su playa es un sitio de interés natural y paisajístico donde muchos van a practicar deportes acuáticos. No os dejéis de ver la Platja Illa Roja.

Durante los meses de verano se celebra en un prado el conocido mercado White Summer Festival, donde encontraréis tiendas de ropa y accesorios al aire libre, gastronomía y conciertos en directo de varios artistas.

Estartit y las Illes Medes

L’Estartit también es un gran destino para nuestras furgonetas y autocaravanas por sus facilidades y distancia entre el parking y el centro. Tenéis que pasear por el paseo marítimo y el núcleo urbano.

Es un pueblo muy conocido por el fondo marino de las Illes Medes, una reserva de fauna y flora marina muy destacables a nivel de todo el Mediterráneo, y un paraíso para hacer submarinismo o snorkel. Una actividad que os recomendamos mucho es ir de la playa de Estartit hasta las Illes Medes en kayak y explorar la zona.

Si viajáis con perro encontraréis la Platja de la Platera con una zona habilitada exclusivamente para perros. Está justo delante del Camping El Molino II.

El entorno de l’Estartit es fantástico, podéis disfrutar del Parque Natural del Montgrí y realizar diferentes excursiones por la zona y cerca de la desembocadura del río Ter.

Os recomendamos la excursión al Castell de Montgrí, desde donde podréis ver Estartit y su bahía desde el aire. Las vistas no tienen precio.

Pernocta

Podéis dormir en el parking de la playa grande de Estartit o en el parking de la playa Els Griells.

Empuriabrava y Roses

Por la comodidad de viajar con nuestro perro, la Platja de la Rubina de Empuriabrava es un entorno magnífico para estar con la furgo un día o los que se os antojen. Esta playa larguísima está «dividida» en 3 partes. La primera pertenece más al núcleo urbano, la segunda destinada a los deportes de agua y la tercera para nuestros perros. Sí, sí… una playa donde podrás estar tranquilamente sin «preocuparte» porque tu peludo se va a corretear o se planta encima de la toalla del vecino. ¡También puedes tener visita tu!

Y lo mejor es que puedes estar aparcado con tu furgo justo delante de la playa, en el camino-parking de arena que hay a lo largo de toda la playa y en el que estaréis tranquilísimos y rodeados de más furgonetas.

Pernocta

Parking de arena justo delante de la playa. Tranquilo y recomendable. Hay algún chiringuito y cerca está el nucleo urbano.

Lo mejor, y lo que hacemos nosotros, es aparcar ahí y desplazarnos andando o en bicicleta hasta el pueblo de Empuriabrava. Esta localidad también es conocida como «la marina más grande del mundo» por sus canales de agua que recuerdan a Venecia, con amarres privados delante de cada casa. También por ser un punto de encuentro de muchos deportistas que quieren practicar vela, kite o windsurf debido a sus condiciones climatológicas.
¿Os suena el SkyDive Empuriabrava? ¡Podéis tiraros hasta en paracaídas!

Muy cerca está Sant Martí d’Empúries, un pueblo medieval que aún conserva sus murallas y el trazado original en varias de sus calles. Las principales arterias del pueblo te llevan hasta la Plaza Mayor, un gran atractivo turístico. También acoge un yacimiento arqueológico de origen griego y romano.

También vale la pena visitar los humedales o más conocidos como Els Aigüamolls de l’Empordà, situados entre las desembocaduras de los rios Fluvià y Muga.

Y no podemos olvidar Roses, la puerta del Cap de Creus. La playa de Roses se extiende varios quilómetros por la bahía hasta la Escala, y podréis disfrutar de su paseo marítimo repleto de restaurantes y terrazas. En su puerto encontraréis unas 400 embarcaciones, y podréis elegir el barco que más os gusta. ¡Soñar es gratis!

Cadaqués y el Cap de Creus

A Cadaqués le sobran las palabras. ¿Quién no ha oído hablar alguna vez de él? Es uno de los pueblos más especiales de la Costa Brava, zona histórica protegida y declarada de Interés Nacional. Se dice que por su situación geográfica estuvo aislado hasta finales del siglo XIX, creció ajeno al mundo, y por eso, ha podido conservar el encanto de sus calles.

Para Salvador Dalí era el pueblo más bonito del mundo, y por eso se instalaron en una casita ahora convertida en casa-museo. ¡Podéis visitarla en Portlligat!
Pero Dalí no fue el único enamorado de Cadaqués, también lo fueron Matisse, Miró, Picasso, Duchamp o Max Ernst. ¿Por algo sería, no?

El mejor plan en Cadaqués es corretear por sus empedradas calles, recorrer el paseo marítimo, tomar algo en una de sus terrazas mientras tomas el sol, bañarte en sus playas y calas o disfrutar de un atardecer desde el puerto. Si subís a la Iglesia de Santa María podréis contemplar las vistas del Mediterráneo.

Para los más aventureros… ¿Os animáis a descubrir el salvaje Parque Nacional del Cap de Creus? Rutas de senderismo, el bonito faro, y calas escondidas que os sorprenderán. ¡Ideal para ir con vuestros perros! Os recomendamos la Cala Prona, Cala La Jugadora y Cala Culip.

También podéis visitar Port de la Selva, Llançà, Colera y Portbou, ya en frontera con Francia y donde finaliza el Camí de Ronda. En esta zona también encontraréis pequeñas calas escondidas para estar solos y la famosa Platja de Garbet, aunque el encanto de la zona lo acapara sin duda Cadaqués.

Pernocta

Parking delante de la Platja de Salvador Dalí, en Portlligat. Muy cerca hay otro parking más grande.

¡Seguimos en ruta!

Esperamos que os haya gustado nuestra ruta en furgo por la Costa Brava. Una vez más ha sido un placer compartir con vosotros nuestra experiencia para que podáis disfrutar con vuestra furgo igual que lo hacemos nosotros.
Muchas gracias por leernos :-*

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